Powered By Blogger

martes, 7 de diciembre de 2010

Carta en corto



Amor de mi herida:
Mañana; de seguro iré a verte. Me levantaré temprano, como pocas veces lo hago, e iré a buscarte.

Me cambiaré incluso la piel, y saldré por tí y hacia tí.

Caminaré y caminaré ansiosa hasta llegar a tu puerta, para eso ya habré dejado los miedos en casa.

Y estaré allí, frente a tu puerta, y seguro que cuando salgas, me quedaré observandote, intentando decirte con los ojos, lo que no puedo decirte con la boca. Que te amo...

Y me acercaré más a ti, te diré buenos días....y te abrazaré.
En ese instante, dudo que puedas comprender mi actitud, dudo de lo que puedas pensar de mí, dudo que me hayas perdonado, y es que sé, que estás molesto conmigo, y estoy de acuerdo contigo en eso.

Porque después de aquella noche, te has empecinado en tratarme como si no me conocieras, como si todo lo vivido, ya se hubiera borrado de tu memoria, y dejame felicitarte, pues tu empeño, ha comenzado a tener tan buen resultado que ni yo misma sé quien soy.

Y mira el grado al que he llegado, en el que nisiquiera la imaginación me hace sentir mejor.

2 comentarios:

Pumara dijo...

cuando uno escribe cosas asi se expone a veces a q te hagan daño luego, pero el amor es asi, una forma de arriesgarse. Y el que arriesga no gana ¿verdad?

Jorge Chávez dijo...

Te doy toda la razón Pumara, pero siempre se aprende, lo importante es que te sientas, solo bien.